Un mes después de su estreno, la mininovela “Mi boda es una trampa” ha acumulado más de 12 millones de visualizaciones en diversas plataformas digitales. Esta producción, que se ha transmitido a través de Instagram, Facebook, TikTok y YouTube del canal 13, se centra en la vida de una mujer de alta posición social, “Magdalena Grajales”, interpretada por Catalina Silva, quien se encuentra a punto de casarse. La historia se complica con el regreso de su antiguo amor, “Rodrigo Duarte”, un ex trabajador de sus tierras, interpretado por Matías Assler. La llegada de Rodrigo desata una serie de secretos y mentiras que amenazan no solo su inminente boda, sino también la vida que ha construido hasta ese momento.
A medida que avanza la trama, se revelan las malas intenciones de su prometido, “Bernardo Saint Jean”, interpretado por Diego Gougain, y de su supuesta mejor amiga, “Pilar Villavicencio”, a quien da vida Piamaría Silva. La dirección de “Mi boda es una trampa” está a cargo de César Opazo, mientras que los guiones son obra de Jaime Morales. El equipo de producción del canal 13 también incluye a Carmen Gloria Román, Caco Muñoz, Emilio Rodríguez y Nicolás Figueroa.
La mininovela cuenta con la participación especial de la actriz Alejandra Herrera, quien es conocida por sus papeles en teleseries de los años 90, como “Amor a domicilio”, “Playa salvaje” y “Marparaíso”. En “Mi boda es una trampa”, Herrera retoma su carrera en el género interpretando a la oficial del Registro Civil, “Alexis Opazo”, en un guiño a su personaje más recordado de la serie “Adrenalina”.
Herrera grabó su participación en la mininovela en agosto, y en septiembre se trasladó a vivir a China, específicamente a la ciudad de Chengdú, donde su esposo, el actor Matías Stevens, obtuvo un empleo como profesor. Desde su nueva residencia en China, Alejandra ha compartido su perspectiva sobre el éxito de la mininovela, afirmando: “y pensar que todo partió acá, en China… es una puerta nueva e innovadora para los artistas”, y añadió: “qué bueno que le fue bien”.
La actriz también destacó que su mención a China se debe a que en este país se originaron los primeros “dramas verticales”, un formato que ha ganado popularidad y que ahora se ha expandido a nivel mundial, incluyendo su llegada a Chile en 2025. Alejandra Herrera expresó su gratitud por haber participado en la primera teleserie vertical de Chile, comentando que su nueva vida en China le ha proporcionado “una fusión milenaria de sabiduría colectiva e innovación de la tecnología… todo ha sido muy lindo, cada lugar te impresiona”.


