
El Gobierno de Chile ha confirmado que seguirá con el proceso de retiro de artefactos no autorizados en el penal ex Punta Peuco, a pesar de los intentos de los reclusos por detener estas acciones a través de recursos judiciales. El ministro de Justicia y Derechos Humanos, Jaime Gajardo, explicó que los tribunales no han interrumpido el proceso de adecuación del recinto, y que la única medida cautelar vigente se refiere temporalmente al ingreso de encomiendas.
La controversia se originó cuando algunos internos presentaron recursos de protección para evitar el retiro de elementos como refrigeradores y toldos, que no están permitidos en los penales comunes. Gajardo indicó que estas acciones fueron declaradas inadmisibles, lo que permite a Gendarmería continuar con las labores de estandarización del penal. “Existe una restricción que se estaba aplicando respecto a la paquetería externa. Eso es lo único que está paralizado. Lo demás, como el retiro de refrigeradores o toldos, no tiene ninguna medida judicial vigente”, subrayó el ministro, añadiendo que los intentos legales de los internos “no han prosperado” en los tribunales.
El secretario de Estado también mencionó que el proceso de reconversión del penal, instruido por el presidente Gabriel Boric, avanza según los plazos y lineamientos establecidos. Esta transformación busca que Punta Peuco abandone cualquier régimen especial y adopte las normas aplicables a los recintos penitenciarios comunes en Chile. “Gendarmería tiene que administrar ese establecimiento como cualquier otro penal del país. Es un establecimiento penal común. Entendamos eso”, enfatizó Gajardo, destacando que el objetivo del Ejecutivo es garantizar equidad en las condiciones carcelarias y evitar privilegios que no existen en el resto del sistema penitenciario.
Desde el Gobierno han reiterado que la adecuación del recinto incluye el retiro progresivo de elementos considerados fuera de norma, así como la reorganización de los espacios internos. Gendarmería continuará ejecutando estas labores en las próximas semanas, consolidando el tránsito definitivo de Punta Peuco hacia un régimen penitenciario estándar, en línea con la política gubernamental de eliminar distinciones entre internos según el tipo de delito por el que fueron condenados.