ChatGPT, con 180.5 millones de usuarios, transforma la educación y la seguridad. La IA mejora la eficiencia en la protección y combate el fraude digital.
ChatGPT ha sido la plataforma a través de la cual muchas personas han comenzado a explorar el mundo de la inteligencia artificial. Según Yahoo Finance, en abril de 2024, la herramienta cuenta con 180.5 millones de usuarios activos mensuales. Los estudiantes utilizan esta tecnología para realizar consultas sobre diversos temas educativos, los ejecutivos buscan asistencia para la elaboración de hojas de Excel, y los programadores solicitan revisiones de código. Sin embargo, como señala Patricia Acosta, directora de la Feria Internacional de Seguridad, “no es solo” una herramienta de asistencia. La inteligencia artificial ha estado presente en el ámbito de la seguridad electrónica durante más de una década.
Acosta explica que los dispositivos de seguridad, como cámaras y sensores, recopilan información de manera continua. Esta información se analiza de forma predictiva para mejorar la eficiencia y anticipar posibles incidentes en un entorno determinado. La capacidad de utilizar los datos recopilados para crear sistemas predictivos que mejoren la protección es notable. “La IA, que se encuentra en ChatGPT, nos puede hacer más eficientes, pero el tema es mucho más amplio y abarca diversas soluciones y desarrollos”, afirma Acosta. Ella subraya la importancia de comprender en profundidad y apreciar los beneficios de la inteligencia artificial, citando como ejemplo una cámara instalada en un poste.
En la edición de 2024 de la Feria Internacional de Seguridad, la compañía coreana Hanwha Vision presentará sistemas de videovigilancia equipados con inteligencia artificial. Estas tecnologías tienen la capacidad de prevenir o combatir distintos tipos de robos mediante análisis avanzados y alarmas de video. Por ejemplo, pueden detectar la dirección de un vehículo, identificar si está detenido, registrar el ingreso a zonas restringidas y reconocer atributos del vehículo, como su color, modelo y marca.
Por otro lado, la implementación de herramientas de ciberseguridad asegura que se utilicen de manera segura para un propósito específico. Esto garantiza que toda la información esté protegida y reservada para su uso. En este contexto, se menciona el fenómeno de los deepfakes, que son imágenes o videos falsificados creados mediante tecnología que permite manipular y modificar contenido audiovisual de tal manera que resulta difícil distinguir entre material auténtico y falso. Los deepfakes se generan utilizando algoritmos que imitan la apariencia y el comportamiento de personas reales, lo que puede resultar en la creación de videos y fotos engañosos.
Un informe de la empresa de informática Kaspersky indica que muchas personas todavía tienen dificultades para comprender el significado de este término. En Perú, el 75% de las encuestadas conocía qué era un deepfake, pero solo el 57% admitió saber cómo diferenciar uno real de uno falso. Esta situación es similar en otros países de América Latina, como Chile, Brasil, Colombia, México y Argentina, donde el 50% de los encuestados no estaban familiarizados con el concepto ni tenían las habilidades necesarias para distinguir entre lo auténtico y lo falso.
A pesar de que los deepfakes representan un avance en el entorno digital, también se señala que muchas personas, especialmente aquellas que no tienen el conocimiento necesario, pueden ser vulnerables a esta tecnología. En este contexto, es crucial educarse sobre el tema. HubSpot destaca que es esencial aprovechar y potenciar las habilidades humanas para abordar problemas de manera efectiva. Es importante que las personas aprendan a comprender y enfrentar los desafíos que presentan los deepfakes, así como recibir formación adecuada para conocer los riesgos y protegerse de manera efectiva.


