
Fiona Harvey avanza en su demanda contra Netflix y Richard Gadd por difamación, tras fallo que permite continuar con sus reclamos por angustia emocional.
La abogada escocesa Fiona Harvey ha logrado un avance significativo en su demanda por difamación contra Netflix y Richard Gadd, el creador de la serie “Bebé reno”. Este avance se produjo después de que un juez dictaminara que la producción no cumplía con la promesa de ser una “historia real”. En un fallo emitido el 27 de septiembre de 2024, el juez Gary Klausner permitió que los reclamos de Harvey por angustia emocional continuaran, basándose en que la representación del supuesto acoso hacia ella fue exagerada y distorsionada en la serie.
La historia que se narra en “Bebé reno” se centra en Donny Dunn, un comediante que es acosado por una mujer llamada Martha Scott, interpretada por Jessica Gunning. Según la trama de la miniserie, Scott acecha a Dunn durante años, llegando incluso a agredirlo físicamente, lo que finalmente resulta en su arresto y condena. Sin embargo, el problema que plantea Harvey es que Scott está basada en una persona real, aunque su nombre no se menciona en la serie, lo que permite que sea identificada rápidamente en las redes sociales a través de detalles y pistas.
Harvey ha reconocido que fue acosada durante un tiempo, lo que resultó en una advertencia policial, pero niega haber cometido los crímenes que se le atribuyen, como agresión sexual o física. A diferencia de la representación ficticia en la serie, nunca fue condenada ni pasó tiempo en prisión. La demanda fue presentada en junio, tras el auge de la plataforma de streaming, y argumenta que la representación de su persona es difamatoria y ha perjudicado gravemente su reputación tanto personal como profesional. Harvey exige más de 170 millones de dólares en daños, acusando a los demandados de haber actuado con malicia al presentarla como una criminal violenta.
El veredicto emitido el viernes es crucial, ya que bloquea los intentos de desestimar el caso. En la resolución, se menciona directamente a la demandante, señalando que las similitudes entre ella y el personaje eran lo suficientemente específicas como para que los espectadores pudieran identificarla. “Ambas son abogadas escocesas viviendo en Londres, acusadas de acoso, y son veinte años mayores que Donny/Gadd”, se indica en el fallo. Además, el juez cuestionó el límite de la verdad, señalando que la inclusión de la afirmación “Esto es real” invita al espectador a interpretar que los eventos retratados son hechos verídicos. El juez determinó que la conducta retratada en la serie era “significativamente peor” que en la vida real, afirmando que “hay grandes diferencias entre el contacto inapropiado sexual y empujar o arrancar los ojos de otra persona”.
A pesar de que se permite que continúe la demanda por difamación, se desestimaron otros cargos relacionados con negligencia y violación de derechos de imagen de Harvey. Desde el inicio de la demanda, tanto Gadd como Netflix han defendido su posición. Gadd, un comediante británico cuya carrera despegó gracias a su relato sobre el sufrimiento que experimentó, ha insistido en que la serie es fiel a su experiencia, aunque admite que algunos elementos fueron modificados para lograr un mayor impacto dramático. En una declaración presentada en julio, Gadd escribió: “Como todos los personajes, el personaje ficticio tiene rasgos de personalidad muy diferentes a los de Harvey”.
A pesar de estas afirmaciones, Gadd admitió en una entrevista con The Sunday Times que tenía reservas sobre la inclusión de ciertos detalles al inicio de la serie, sugiriendo que sabía que había sido dramatizada en varias escalas. Por su parte, la compañía Netflix aseguró en julio que defenderían el caso con firmeza, “respaldando el derecho a contar la historia”. El periódico Independent informó que un juzgado federal ha fijado el 6 de mayo de 2026 como la fecha en la que ambas partes deberán comparecer ante la corte. Se estima que el proceso tendrá una duración de dos semanas hasta que se conozca el resultado de la demanda.