El 1 de noviembre, Nicolás Solabarrieta confirmó el fallecimiento de su abuelo, Cirio Solabarrieta. En ese momento, su hijo Fernando Solabarrieta se encontraba participando en el reality show de Mega, “El Internado”. Debido a esta situación, Fernando tuvo que abandonar temporalmente el encierro para poder despedirse de su padre. El relator deportivo se comunicó desde Perú con el programa “Only Fama”, donde se le preguntó sobre el deceso de su padre.
“Él estuvo delicado de salud durante los últimos años. Entré al reality sabiendo que había logrado una recuperación y me quedé tranquilo. Había estado con él desde marzo hasta justo antes de entrar, y se iba ya mejor a Puerto Natales”, recordó Fernando. A pesar de estar desconectado del mundo exterior, Fernando consultó a la producción sobre el estado de salud de su padre y le informaron que había empeorado. Por esta razón, le dieron todas las posibilidades para poder salir.
“Le aviso a mis compañeros que estoy viviendo esa situación. Recibí una muestra de cariño tremenda de todos los muchachos y las muchachas. Fui a competir, porque conozco a mi padre y sabía que él quería que compitiera hasta el último momento antes de irme al aeropuerto”, relató Fernando Solabarrieta.
Él confesó que tuvo una sensación extraña y que sintió que lo sacaron antes de tiempo. “Cuando iba avanzando, tuve la percepción de que se venía una mala noticia. Me pasan el teléfono, mi mujer me dice que ‘papá se fue’. Obviamente, fue una tristeza grande, una pena muy profunda”, compartió.
La importancia de “El Internado” para Solabarrieta
“El viaje de vuelta en el avión fue muy difícil. Al llegar me estaba esperando mi mujer en la madrugada. En el vuelo de conexión hacia Puerto Natales se sube mi hermano, se subió un amigo, se sube mi prima, y empieza a subirse mucha gente a darnos cariño. Desde ahí estoy envuelto en una suerte de burbuja de amor y cariño que hace que a mi viejo lo extrañe, pero que el golpe fuerte todavía no lo reciba”, confesó Fernando.
Al explicar por qué regresó al reality show después del fallecimiento de su padre, Fernando dijo que “apenas salí, me dijeron que mi viejo veía el programa todas las noches y que sentía que su hijo había vuelto a ser su hijo. Mi mujer me dijo: ‘Siento que otra vez te brillan los ojos y que te estás recuperando realmente’.”
A modo de reflexión sobre su paso por “El Internado”, Fernando destacó lo importante que ha sido el programa para él. “Este proceso, por extraño que parezca, lo estoy viviendo dentro de un reality que es mucho más que un programa de televisión o un programa de farándula, que pueden serlo. Pero para mí es un proceso de vida, es casi una terapia. Una vez que despedí a mi padre y estuve con mi madre, quise volver porque ha sido un proceso de sanación en mi vida.”
