En pleno período de cierre de año, el mundo laboral se enfrenta al proceso de evaluar las metas alcanzadas y establecer los objetivos para 2026. Y entre los temas abordados, se encuentra uno que siempre genera debate, la negociación salarial.
Según datos revelados por la última edición de la
Guía Salarial de la consultora Robert Half, tres de cada diez profesionales se sienten más seguros para negociar un mejor sueldo en 2026. Sin embargo, los temores persisten a la hora de argumentar razones para lograr un mejor salario.
De hecho, un 32% de los encuestados en el estudio dijo que justificar sueldos es el principal desafío al negociar. Aunque las expectativas salariales van en aumento y muchos profesionales se sienten con mayor capacidad para negociar, muchos profesionales también tienen dudas sobre cómo justificar un sueldo más alto, manejar el riesgo de perder una oferta o sostener conversaciones difíciles.
El director asociado de Robert Half Chile, Caio Arnaes, recordó que la confianza es clave para este tipo de situaciones. En un mercado laboral en constante evolución, “conocer el propio valor y negociar con claridad y datos es más importante que nunca”, dijo.
¿Qué factores considerar al realizar una negociación salarial?
Existe una serie de condiciones que los profesionales deberían tener en cuenta cuando se llega a esta situación.
Entre los factores externos, se pueden considerar el momento económico y la situación general de la empresa, ya que muchas negociaciones no llegan a buen puerto porque, pese a tener consciencia sobre el valor de un profesional y su aporte, no se cuenta con medios para elevar las condiciones salariales en un momento dado. “Es bueno que los profesionales investiguen sobre esa situación y los planes futuros de la organización, para que den los pasos adecuados sobre una base realista en ese sentido”, analizó Arnaes.
Y entre los puntos que se relacionan con el profesional propiamente tal, hay que analizar la experiencia adquirida y objetivos logrados. Asimismo, la formación continua y la búsqueda de actualización y adquisición de nuevas herramientas que puedan aportar nuevas soluciones e innovación en su área suman puntos al negociar.
Comprobar los logros profesionales también es un factor relevante. En el caso de un proceso de selección, no basta con mencionar lo que se hizo, sino el cómo se logró y el impacto real para el trabajo, el equipo y la organización. Y, finalmente, entender que, “en muchos casos, una mejor oferta puede pasar por mejores beneficios no salariales, como flexibilidad horaria, bonificaciones, apoyo económico para estudios o salud y oportunidades de desarrollo profesional”.
“Es importante, a la hora de sostener una negociación salarial, considerar todos los factores. El dinero es el pilar principal, pero muchas veces los beneficios no salariales son capaces de compensar la situación y ofrecer al profesional una alternativa mucho más fuerte”, concluyó el ejecutivo.