A partir del 1 de enero, el sueldo mínimo en Chile ha experimentado un incremento de más de 10 mil pesos, alcanzando un total de $510.636 brutos mensuales. Este ajuste impacta directamente en algunos de los beneficios que otorga el Estado, especialmente en la Asignación Familiar y la Asignación Maternal, que están diseñadas para apoyar a trabajadores, pensionados y mujeres embarazadas. El pago de estas asignaciones se realiza en función del número de cargas familiares que se encuentren acreditadas por cada beneficiario.
Reajuste automático de beneficios
El reajuste de la Asignación Familiar y la Asignación Maternal se lleva a cabo de manera automática cada vez que se produce un aumento en el sueldo mínimo. Este mecanismo no solo ajusta los montos de las asignaciones, sino que también puede ampliar el número de personas que se benefician de estas ayudas estatales.
Detalles sobre la Asignación Familiar y Maternal
Con el nuevo sueldo mínimo establecido en $510.636, los tramos de beneficiarios para la Asignación Familiar y la Asignación Maternal se han definido de la siguiente manera:
- $21.243 por carga para aquellos que perciban un sueldo mensual que no supere los $598.698.
- $13.036 por carga para quienes tengan un sueldo mensual entre $598.698 y $874.460.
- $4.119 por carga para quienes tengan un sueldo mensual entre $874.460 y $1.363.858.
Es importante señalar que las personas cuyo sueldo mensual exceda los $1.363.858 y que tengan cargas familiares acreditadas no tienen derecho a recibir la Asignación Familiar.
Modalidad de pago de las asignaciones
Ambos beneficios, la Asignación Familiar y la Asignación Maternal, se abonan a los beneficiarios junto con su sueldo o pensión, dependiendo de cada situación particular. La Asignación Familiar está destinada a trabajadores tanto dependientes como independientes, así como a pensionados. Por su parte, la Asignación Maternal se otorga a trabajadoras que se encuentren en estado de embarazo o a empleados cuyos cónyuges sean sus cargas y estén en periodo de gestación.


