TikTok ha dejado de estar disponible para sus 170 millones de usuarios en Estados Unidos tras la entrada en vigor de una ley que exige a su empresa matriz, ByteDance, vender su participación en la aplicación o enfrentar una prohibición. En un mensaje emergente que apareció en la aplicación de videos cortos antes de la medianoche, la compañía comunicó: “Se ha promulgado una ley que prohíbe TikTok en los EEUU. Lamentablemente, eso significa que no puedes usar TikTok por ahora”. El mensaje continuó: “Tenemos la suerte de que el Presidente Trump haya indicado que trabajará con nosotros en una solución para restablecer TikTok una vez que asuma el cargo. ¡Estén atentos!”. A partir de ese momento, el feed de videos de TikTok se volvió inaccesible para los usuarios estadounidenses, que representan uno de sus mercados más grandes. La aplicación dejó de estar disponible en las tiendas de aplicaciones de Apple y Google, y otras aplicaciones de ByteDance, como la aplicación de edición de videos CapCut y la red social Lemon8, mostraron mensajes similares y también fueron retiradas de las tiendas de aplicaciones.
El viernes, la Corte Suprema de EEUU confirmó una ley aprobada por el Congreso el año pasado que obliga a ByteDance a vender la plataforma o enfrentarse a una prohibición nacional. Esta decisión fue impulsada por preocupaciones sobre la posibilidad de que Beijing pudiera utilizar la plataforma para espionaje o para difundir propaganda. TikTok ha negado que el gobierno chino tenga alguna influencia sobre la aplicación. El presidente electo, Donald Trump, mencionó el sábado que “muy probablemente” emitirá una extensión de 90 días al plazo cuando asuma la presidencia el lunes. Sin embargo, a partir de la medianoche, a empresas como Apple, Google y Oracle se les prohibió proporcionar servicios para distribuir o alojar la aplicación de video, bajo la amenaza de multas de hasta 5.000 dólares por usuario.
La decisión de que la aplicación ya no esté disponible indica que las empresas decidieron que los riesgos asociados con violar la ley entre la fecha límite de medianoche y la investidura de Trump eran demasiado altos. Apple, Google y Oracle no respondieron a las solicitudes de comentarios. TikTok, el viernes por la noche, declaró que las declaraciones de la Casa Blanca y del Departamento de Justicia “no habían logrado brindar la claridad y la seguridad necesarias a los proveedores de servicios que son fundamentales para mantener la disponibilidad de TikTok en EEUU”, y que sin “una declaración definitiva para satisfacer a los proveedores de servicios más críticos que aseguren la no aplicación de la ley, TikTok se vería obligado a desaparecer el 19 de enero”. La secretaria de prensa de la Casa Blanca, Karine Jean-Pierre, afirmó el sábado que “no había ninguna razón para que TikTok u otras empresas tomen medidas en los próximos días antes de que la administración Trump asuma el cargo el lunes”.
El cierre de TikTok pone fin a una semana en la que los ejecutivos de TikTok y ByteDance intentaron elaborar un plan para evitar el cierre, según varias fuentes familiarizadas con el asunto. El viernes, Trump mencionó que había hablado con el presidente Xi Jinping y discutido sobre TikTok con el líder chino. Los medios estatales chinos confirmaron que los dos líderes hablaron, aunque no especificaron si TikTok fue parte de la conversación. TikTok ha sostenido que una escisión no era tecnológicamente factible en el marco temporal, mientras que Pekín ha indicado previamente que se opondría a cualquier venta. La empresa había depositado sus esperanzas en Trump, quien durante su campaña prometió “salvar” TikTok, en parte debido a que utilizó la plataforma para interactuar con votantes jóvenes.
La incertidumbre generada por la situación ha llevado a los influencers a lamentar la pérdida de la aplicación y a dirigir a sus seguidores hacia rivales como Instagram de Meta. Esta situación también ha provocado caos dentro de la propia empresa. En los días previos a la prohibición, TikTok se apresuró a tranquilizar a su personal estadounidense, asegurándoles que seguirían teniendo trabajo y recibiendo sus salarios incluso si la aplicación cerraba, según tres personas con conocimiento de la situación. Mientras tanto, los especialistas en marketing han comenzado a desviar el gasto en publicidad de la plataforma. Un comprador de medios indicó que habían pausado todo su gasto en la plataforma en EEUU, aunque TikTok seguía alentando a gastar su presupuesto en otros mercados. Un director de una gran agencia de publicidad comentó: “Es muy caótico y, aunque la gente no se sorprende, era realmente imposible planificarlo”.


