La vocera del gobierno porteño, Laura Alonso, rechazó hoy la solicitud del secretario de Turismo de la Nación, Daniel Scioli, para postergar el inicio de clases en la Ciudad de Buenos Aires con el fin de favorecer la temporada turística de verano. “Las clases se van a iniciar el 24 de febrero, como está previsto en el calendario oficial”, indicó Alonso al ser consultada sobre el tema. “En la Ciudad, la educación y cumplir con el ciclo escolar son una prioridad. Fundamentalmente, no negociamos fechas por algún beneficio”, agregó en una conferencia de prensa donde Jorge Macri presentó una serie de reducciones y exenciones impositivas que impactan directamente a comerciantes, monotributistas y jubilados.
Alonso insistió en que “todos los que quieran hacer turismo pueden hacerlo. Hay muchísimos chicos que tienen derecho a acceder a la escuela. Y vamos a cumplir, siempre, con nuestro calendario oficial”. Estas declaraciones fueron una respuesta al planteo que realizó públicamente Scioli en una entrevista radial, donde defendió su propuesta de aplazar el comienzo del ciclo lectivo en la Ciudad de Buenos Aires. Desde el balneario Mar del Plata, Valentín Díaz Gilligan confirmó que trasladó la solicitud y se comprometió a transmitir la preocupación del jefe de Gobierno, afirmando que una medida semejante era una forma de “aplicar sentido común” y “armonizar todo el país tras el feriado de Carnaval”.
En el esquema actual, el inicio de clases para los niveles inicial y primario está previsto para el próximo 24 de febrero, mientras que el nivel secundario comenzará el 5 de marzo. Según Scioli, la postergación implicaría que todos comiencen el miércoles 5 de marzo, evitando cortes por los feriados de Carnaval, que caen el lunes 3 y martes 4 de marzo. Sin embargo, Alonso ya había deslizado ayer desde su cuenta personal en X: “La particularidad del Secretario de la Nación me resulta útil para reforzar una vez más que siempre primero”.
El debate sobre este tema ha ocupado los últimos días y ha estado involucrado en la discusión sobre la ocupación en la Costa Atlántica y la afluencia de argentinos a otros destinos internacionales, como Brasil, ante las ventajas del tipo de cambio favorable para viajar al exterior. Este lunes, Fernando Maraude, administrador general de Mar del Plata, destacó en Infobae que “recién esta semana, con el aumento de las temperaturas cálidas, se comenzó a ver un clima ideal para la playa y estamos en plena temporada”. “Desde el domingo 5 vemos una mayor cantidad de turistas. Hoy fue el mejor día en cuanto a ocupación. Venimos hablando entre semana de un 65% a 70% de ocupación, y los fines de semana llega al 80%. Todavía hay margen para seguir creciendo, esperemos que el clima acompañe”.
En Pinamar, según fuentes municipales, el promedio de ocupación alcanzó el 81%, lo que representa un incremento del 6% respecto al año pasado, cuando se registró un 75%. Este contrapunto se suma a la lista de desencuentros que hace semanas mantiene el PRO y Javier Milei en relación a la estrategia política de cara a las elecciones legislativas de octubre. Los macristas y los libertarios están en una abierta disputa sobre el armado de listas de candidatos, evaluando si conformar una misma lista electoral o ir separados.
Los nuevos beneficios fiscales en la CABA fueron anunciados el martes, y se espera que impacten a medio millón de personas, incluidos jubilados. Se trata de medidas que ya están en marcha en el proceso legislativo, y buscan simplificar trámites, disminuir costos y fomentar el desarrollo económico. Entre las iniciativas, se anunció la devolución exprés de saldos a favor de Ingresos Brutos de hasta $2 millones de pesos, lo que beneficiará a 221.000 contribuyentes y permitirá realizar el trámite en solo 96 horas hábiles. También se amplió la exención total del ABL para 37.000 pensionados adicionales que perciban cuatro jubilaciones mínimas, además de las personas con discapacidad que cumplan con los mismos requisitos.
Paralelamente, se implementaron beneficios para trabajadores independientes y pequeñas empresas, beneficiando a 138.000 contribuyentes que dependen de su facturación anual. Asimismo, se eliminaron impuestos de sellos en contratos de alquiler comercial, turístico y leasing de vehículos, así como en operaciones inmobiliarias menores a $205. Además, se reducirá la alícuota en el área de Barracas para impulsar el desarrollo inmobiliario. El Monotributo Unificado Nacional simplificará el pago para 207.000 porteños, y se implementará un plan de regularización de deudas con condonación de intereses en tributos como ABL, patentes e Ingresos Brutos.

