Karün enfrenta una crisis económica y evalúa un posible cierre. Necesita urgentemente un aumento de capital de 2 millones de dólares para sobrevivir.
Septiembre comenzó con desafíos significativos para Karün, una startup chilena que se especializa en la producción de lentes elaborados con materiales reciclados provenientes de la Patagonia. A principios de este mes, se hizo pública la situación crítica que enfrenta la empresa, tras la divulgación de cartas escritas por su fundador y CEO, Thomas Kimber. En estas misivas, Kimber reveló que la compañía está atravesando un complicado momento financiero.
A raíz de la gravedad de la crisis, desde agosto de este año, Karün ha estado considerando la posibilidad de iniciar un proceso de cierre debido a la falta de financiamiento. En las cartas dirigidas a sus inversionistas, Kimber mencionó que algunos de ellos habían expresado su apoyo a un plan de reducción de costos y optimización que la empresa planeaba implementar. Sin embargo, la posible clausura de Karün se debe a la falta de concreción del respaldo financiero que se había comprometido.
En medio de esta situación, la empresa está explorando dos alternativas que podrían ayudar a evitar su cierre: un plan para alcanzar la rentabilidad a corto plazo y un aumento de capital. Uno de los últimos ajustes que realizó la startup fue el cierre de su tienda y oficina, que se encontraba en la calle Turismo, frente al lago Llanquihue, en Puerto Varas. Según el medio DF MAS, el arriendo de esta casona de tres pisos ascendía a $7,5 millones mensuales.
Para poder continuar operando, Karün necesita urgentemente asegurar un aumento de capital de 2 millones de dólares, lo que equivale a aproximadamente $1,89 mil millones en pesos chilenos, según el tipo de cambio actual. Si logra obtener este aumento, la empresa podría sobrevivir durante un año, con la promesa de alcanzar la rentabilidad en un plazo de 365 días.
Un factor crucial en este proceso es el apoyo que podría ofrecer Wildsur, el family office del matrimonio Leria Luksic, que posee cerca del 25% de la compañía. Este financiamiento es vital para los inversores más pequeños, quienes están a la espera de las decisiones que tomen los inversores más grandes. Una fuente citada por el medio indicó: “Para que Karün supere el momento actual, se hace imprescindible que se levante el 100% del capital requerido (los dos millones de dólares), y eso aún no se concreta”.


