El ex presidente de Bolivia, Evo Morales, quien ocupó el cargo desde 2006 hasta 2019, realizó declaraciones este martes en las que afirmó que sus comentarios sobre el ataque armado que denunció el domingo fueron malinterpretados. Morales insistió en que no portaba armas ni disparó contra la Policía, como sostiene el Gobierno de Luis Arce.
En una entrevista en la radio cocalera Kawsachun Coca, Morales acusó al ministro de Interior, Eduardo Castillo, de propagar “mentiras” sobre los eventos del domingo, en los que se vio involucrado. El ex mandatario afirmó: “Él (Del Castillo) sabe que miente, por eso ha tardado tantas horas para mentir. Ahora yo soy el arma, el disparado. La víctima es el culpable, el victimario. ¿Quién puede creer eso en Bolivia, quién en el mundo? La peor mentira”.
Morales también subrayó que nunca afirmó que los policías lo atacaron y que sus palabras fueron tergiversadas. En sus declaraciones, mencionó: “Yo tengo un problema, los aimaras y quechuas perfeccionamos el castellano, esa es nuestra debilidad. Eso (eso) lo agarran y tergiversan”.
El líder del Movimiento al Socialismo (MAS) también enfatizó que es “totalmente falso” que haya disparado o que estuviera armado. En la madrugada del domingo, su vehículo fue atacado y recibió más de 14 disparos, resultando el conductor herido en la cabeza.
Morales, quien se encuentra distanciado de Arce, acusó al mandatario de planificar el operativo junto con dos ministros, incluyendo al ministro de Defensa, Edmundo Novillo, con el objetivo de acabar con su vida. El lunes, Morales intentó evitar un control antidrogas, pero su vehículo atropelló a un agente durante la huida, lo que llevó a que la Policía disparara.
En una publicación en X, Morales se refirió a Castillo como “el responsable del intento de asesinato perpetrado el pasado domingo” y aseguró que “él organizó y ordenó el operativo”. Además, criticó que ahora Castillo realiza una “investigación” y afirma que ellos son los responsables, mientras que Morales reiteró su demanda de una investigación “internacional independiente” por parte de organismos de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA) y de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC).
Estos acontecimientos se producen en un contexto en el que los seguidores de Morales mantienen un bloqueo de caminos que ya lleva 16 días, exigiendo el retiro de los procesos judiciales por estupro y trata de personas contra el gobernante, así como una solución a la situación económica y la defensa de la candidatura presidencial oficialista para 2025.
Los seguidores del ex presidente boliviano han declarado que el jefe de Estado, Arce, “tiene los días contados”. El diputado del MAS, Gualberto Arispe, señaló que sería necesario “aprehenderlo” y luego trasladarlo en helicóptero a la ciudad oriental de Santa Cruz, argumentando: “Nunca más va a repetir esta oportunidad (para) que le puedan perseguir y disparar (…) el hermano Ayma ya está resguardado”.
(Con información de EFE)


